El puerto de Hamburgo, una gran operación de reciclaje urbano, donde el litoral ve alterada, pero no reducida, su artificialización; aunque hay una clara voluntad de re introducir la naturaleza, la ribera sigue siendo una línea de hormigón (algo probablemente difícil de evitar al ubicar sobre los rellenos edificios que tendrán una cierta voluntad de permanencia…)