La localización en la ciudad de las actividades comerciales sólo puede entenderse teniendo en cuenta como funcionan sus habitantes. Esto hace de cada ciudad un territorio especial, aunque algunas lógicas sean comunes.
Los habitantes suelen tener la costumbre de salir de sus casas a diario por múltiples motivos; aunque algunos salen sólo para comprar, una parte importante lo hacen por otros motivos. Al valorar su tiempo, en general sólo están dispuestos a desplazarse con un único propósito cuando este les causa una satisfacción clara o cubre una obligación (ganar dinero con su trabajo, cumplir con sus obligaciones, hacer algo que les ilusiona…). En todo caso, es común que se aproveche un único viaje para hacer varias cosas.
Ir a comprar puede ser desde algo rutinario a una actividad ilusionante, y esto no sólo depende de la tienda, sino también de la mercancía. No solo su naturaleza (carne, lectura, aparatos…) sino también su precio, su calidad o si está de moda… el problema puede así definirse por:
– Aspectos en los que el comprador tiene un (cierto grado de) control
- Qué comprar y cuando
- Dónde comprar (+1)
- Hacer un viaje específico para comprar o combinarlo con otro motivo (+2)
- Rutas por la ciudad para cualquier propósito. (+3)
- Cuanto tiempo dedicar a la compra (+4)
– Aspectos que el comprador no controla pero influyen en sus decisiones
- Cualidades del espacio de venta (+5)
- Cualidades del vendedor
- Cualidades del producto
Como urbanista, para este artículo tienen interés los aspectos marcados con una (+).
(+1) Es la cuestión central, pero es el resultado del resto
(+2) Suele estar relacionado con el tipo de bien; para cosas especiales y emocionantes es más fácil hacer un viaje exclusivo, para cosas más corrientes (como comida) se puede ir al volver del trabajo.
(+3) Las rutas cotidianas son el lugar por el que mantenerse al día de muchas cosas que ofrece la ciudad
(+4) Se dedica más tiempo (y por tanto se está dispuesto a ir más lejos) para comprar algo atractivo
(+5) Una tienda atractiva atrae (reiterativo, pero cierto…)
¿Y cómo se puede ver todo esto en una ciudad real como Madrid?
Madrid es una ciudad europea con un centro urbano en el que en los últimos 100 años se han invertido ingentes cantidades de dinero para poder facilitar el acceso por transporte público y en coche privado. Cada día entran en la ciudad o se mueven por ella miles de personas para ir a trabajar, estudiar, pagar sus impuestos, llevar al perro al veterinario, ver a su novio, ir a una manifestación… todos ellos ven vallas de metro, vallas publicitarias, y muchas tiendas de diversos tipos, vayan por donde vayan.
Es relevante saber:
Donde vive la gente
Donde trabajan
Como se mueven
Donde están las tiendas, no sólo en conjunto sino por tipos