Barcelona (1.615.448 habitantes en 2011 en el municipio) es la ciudad más poblada de Cataluña, y su área metropolitana concentra a la mayoría de la población catalana.
Ya era una ciudad portuaria en tiempos romanos, y durante la edad media consolidó su papel dominante del reino aragonés, con una expansión colonial por el mediterráneo que alcanzó hasta Atenas.
Tras la unión de Castilla y Aragón, Barcelona mantiene un papel relevante, que se verá potenciado con la revolución industrial, convirtiéndose en uno de los principales focos de innovación de la península ibérica desde el siglo XIX. Es en ese contexto en el que hay que entender a Antoni Gaudí y a Ildefonso Cerdá.