Artículo corto

Mediterráneo español (12)

Sotogrande es una iniciativa del empresario estadounidense Joseph McMicking, asociado al constructor de campos de golf Robert Trent Jones a principios de la década de 1960. Se desarrolla en el municipio de San Roque (provincia de Cádiz), a poca distancia al Norte de Gibraltar. Los arquitectos Corrales y Molezún tienen gran protagonismo en la definición del planeamiento y en algunos elementos arquitectónicos, como el  Hotel Sotogrande. El Decreto 2990/1965 asigna a la actuación los beneficios fiscales propios de un Centro de Interés Turístico Nacional según la Ley 197/1963, en el marco de la agresiva política de fomento de la actividad turística. El proyecto se amplía en 1965 con la construcción de una cancha de polo. La combinación de campo de golf, puerto deportivo, buenas instalaciones deportivas y la configuración de una oferta residencial de muy alto nivel económico ha contribuido a una imagen de lujo para este punto final hacia el Sur de la Costa del Sol.

Ruta arquitectura de vacaciones en Cádiz y Málaga, Junta de Andalucía

Hotel Sotogrande, de Corrales y Molezún (1963-1965), en la Base de Datos del Patrimonio Inmueble de Andalucía


Mediterráneo español (11)

Marina d’Or se desarrolla al norte del núcleo de Oropesa de Mar. Desarrolla un modelo en primera línea de playa pero que busca romper la estacionalidad del turismo estival tradicional a través de varios campos de golf, balneario, pistas de esquí artificial y otras instalaciones. El desarrollo actual ocupa una franja de terrenos de menos de 1km de profundidad entre la vía férrea litoral y las playas, con una clasificación como suelo urbanizable desde la década de 1980.

En 2010 se ha aprobado el Programa de Actuación Integrada de Marina d’Or Golf (3 campos, con más de 33.000 viviendas y más de 8 millones de m2 de suelo total), que a largo plazo supondrá la extensión hacia el interior del proyecto.

Mediterráneo español (10)

El complejo de El Toyo, a 15 km al este de la ciudad de Almería (dentro del mismo municipio) y a 3 km de su aeropuerto, se inicia vinculado a los preparativos de los Juegos del Mediterráneo de 2005, estando destinado a albergar a los atletas. Ocupa una extensión de 260 hectáreas, que en su mayoría eran originalmente propiedades del Ayuntamiento y del Estado.

Se trata de una operación de iniciativa pública gestionada por la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA), en colaboración el Ayuntamiento de Almería. El programa incluye un campo de golf de 18 hoyos (68 hectáreas) y siete establecimientos hoteleros de alta gama, de los cuales tres en primera línea de playa. Se plantean 3.990 viviendas (418.000 m2 construidos), 87.430 m2 construidos de uso hotelero, 41.339 m2 construidos de usos terciarios y de ocio, y 614.815 m2 de suelo destinado a espacios libres públicos.

Tras la conclusión de los Juegos del Mediterráneo el desarrollo del proyecto no ha alcanzado todavía los objetivos originales.

Mediterráneo español (9)

Costa Ballena se levanta sobre el antiguo cortijo “La Ballena”, en suelos de los municipios gaditanos de Rota (cerca de 300 hectáreas) y Chipiona (cerca de 100).

En 1985 la Junta de Andalucía elabora el “Plan Turístico del Litoral del Área Bahía de Cádiz- Río Guadalquivir”, en el marco del Programa de Actuación sobre el litoral Andaluz. La Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA) recibe la encomienda de desarrollar el proyecto urbanístico, contando con financiación europea a través de los fondos FEDER. La mayoría de los propietarios privados del suelo participan en la formación del planeamiento y en la ejecución. El Plan Parcial de Ordenación del Área de la Ballena de Rota se aprueba definitivamente en mayo de 1990. La Junta de Compensación se constituye en 2003, y se disuelve en 2007, quedando en activo la Entidad Urbanística de Conservación (que ejerce las funciones normalmente correspondientes a los municipios para la conservación de la urbanización ejecutada).

La ordenación se produce en torno a campos de golf, combinando vivienda unifamiliar y colectiva con una clara vocación turística con la presencia de hoteles y servicios.

Mediterráneo español (8)

Empuriabrava surge como iniciativa turística en el municipio de Castelló d’Empuries a mediados de la década de 1960. Supone la creación de una marina residencial (similar en concepto a Port Grimaud en Francia, iniciativa lanzada en la Costa Azul pocos años antes), integrando en una red de canales navegables un conjunto de viviendas unifamiliares y colectivas para las que la posibilidad de atracar un velero al pie de su puerta se convierte en un importante atractivo. Al proyecto se asocia un aeródromo deportivo. La gran mayoría de las parcelas están edificadas en la actualidad, y se aprecia una importante estacionalidad en su ocupación, con unas 15.000 viviendas en las que están empadronadas algo menos de 8.000 personas (2011) aunque en el verano pueden alcanzarse cerca de 80.000 ocupantes.

El anteproyecto de modificación de la Ley de Costas española incluye determinaciones específicas para este caso, singular en el territorio nacional, de tal manera que se pretende aportar seguridad jurídica a los propietarios. Hasta la fecha la delimitación del dominio público y sus zonas de protección por referencia a la línea alcanzada por el mar en la marea más alta suponía un claro impacto en una urbanización cuyos canales están sometidos a marea. El caso ha suscitado polémica en el marco del debate sobre esta ley y su incidencia en el sector turístico.


Mediterráneo español (7)

Los artículos precedentes sobre el turismo en el mediterráneo español trataban de municipios en los que el turismo ha contribuido a formalizar importantes tejidos urbanos; no obstante, no había en ellos una idea de promoción y proyecto unitario, sino una superposición de proyectos individuales sobre un marco geográfico común. Los siguientes artículos refieren procesos en diferentes puntos del litoral español (Costa Ballena está en el Atlántico, pero sigue lógicas similares) los que hay un proyecto unitario, con una creación de tejidos urbanos ex novo, no apoyados en núcleos urbanos preexistentes. Su creación en diferentes momentos y bajo diferentes administraciones crea diferencias entre todos ellos, tanto en posicionamiento turístico como en formas de utilizar el territorio como activo. La ciudad turística se desarrolla en ellos con una mayor autonomía, tanto para bien como para mal.

Mediterráneo español (6)

Jávea presenta una condición singular entre estos ejemplos de la costa de Alicante: un perfil de primera línea de costa dominado por la vivienda unifamiliar y edificaciones de alturas muy comedidas. En la zona norte hay un largo frente de costa en el que la vivienda unifamiliar aislada, separada de la calle, es dominante, y en la zona sur las alturas máximas no superan cinco plantas. La organización de las zonas de restaurantes y comercios también responde a patrones de baja altura, con una ordenación del aparcamiento poco usual en esta zona, y se aprecian un claro esfuerzo de renovación y cualificación de la oferta hostelera.

32.649 habitantes empadronados en 2011, de los cuales

–           55% extranjeros

–           43% ciudadanos de otros estados de la Unión Europea

–           26% Británicos

–           7% Alemanes

–           2% Marroquís

Por grandes grupos de edades, únicamente en los menores de 16 son mayoritarios los españoles. Están empadronados casi 2,5 veces más mayores de 64 extranjeros que españoles

Mediterráneo español (5)

Altea cuenta con tres grandes zonas: un núcleo tradicional de interior con características aún rurales, un corredor costero en torno a la carretera nacional que ha ido creciendo con usos turísticos intercalados con los tradicionales de huerta, y un conjunto de grandes urbanizaciones de vivienda unifamiliar en Altea Hills. Estas urbanizaciones ocupan las zonas de colinas orientadas hacia Benidorm (y el sur), y combinan desarrollos de decenas de viviendas en serie según modelos estandarizados con proyectos individuales.

24.056 habitantes empadronados en 2011, de los cuales

–           38% extranjeros

–           26% ciudadanos de otros estados de la Unión Europea

–           6% Británicos

–           5% Rumanos

–          3% Alemanes

Vista desde las colinas hacia el Sur y Benidorm

Desarrollo unifamiliar en Altea Hills

El corredor de la carretera nacional en la costa

 

 

Mediterráneo español (4)

El núcleo turístico principal de Calpe ocupa una franja costera marcada por el Peñón de Ifach, un gran macizo rocoso sobre una península, similar al Peñón de Gibraltar y otras formaciones de este tipo en la costa mediterránea. La franja costera muestra similitudes con Benidorm al apoyarse principalmente en hoteles y edificios de apartamentos de gran altura, pero además el municipio cuenta, en las colinas que rodean a la llanura costera, con una importante cantidad de viviendas unifamiliares muy vinculadas al turismo o la presencia más o menos permanente de residentes extranjeros; estos son mayoritarios entre la población local, y por su procedencia cabe suponer que se han asentado por razones vinculadas a alguna forma de turismo.

Tanto el Peñón como la laguna que se encuentra detrás de la zona hotelera y los acantilados costeros son zonas de interés ecológico, lo que plantea la necesidad de un delicado equilibrio con los impactos ambientales de estas zonas urbanas.

29.718 habitantes empadronados en 2011, de los cuales:

–           62% extranjeros

–           50% ciudadanos de otros estados de la Unión Europea

–           15% británicos

–           13% alemanes

–           6% rumanos

Por grandes grupos de edades, únicamente en los menores de 16 son mayoritarios los españoles. Están empadronados casi 5 veces más mayores de 64 extranjeros que españoles

Mediterráneo español (3)

En Denia se aprecia un papel organizador de comarca por comercios y servicios anterior a la llegada del turismo masivo, en el que además confluye una función portuaria (es un punto de acceso a las Baleares a través de barcos rápidos). Si bien todos los municipios de la zona cuentan con un casco antiguo, en el caso de Denia se aprecia que este ha tenido una evolución más gradual, con una centralidad más clásica en términos comerciales y de servicios.

Al contrario que en Benidorm, no se ha apostado por el crecimiento en altura. El centro, con funciones turísticas que han colonizado parcialmente un frente portuario de pequeñas edificaciones con una zona de restauración, se ha visto ampliado hacia el Oeste en torno a la playa con una zona turística en la que subsisten clara trazas de su origen informal sobre la huerta tradicional. El crecimiento hacia el Este se extiende sobre una costa acantilada de baja altura con pequeñas calas a la sombra de un gran macizo montañoso, con una zona de vivienda unifamiliar de gran superficie de parcela y un nivel socioeconómico mucho más alto. Coexisten hoteles, apartamentos en alquiler y apartamentos y casas en propiedad.

El casco antiguo aparece como particularmente bien conservado y con un buen nivel de actividad comercial y hostelera

44.726 habitantes empadronados en 2011, de los cuales:

  • 30% extranjeros
  • 18% ciudadanos de otros estados de la Unión Europea